¡Por favor, un médico!

Lucas, aprovechando que Carlos se ha ido a su pueblo consigue colar una extranjera en la habitación con el fin de pasar una noche de juerga. Reme está preocupada ya que Luís ha salido y Lara no se encuentra bien. Preocupada por la niña, decide avisar a un médico de guardia. El pobre doctor no sabe la noche que le espera en el hostal, tiene que atender a la niña, a Sonsy que viene muy sensible del club, a Filo que se resiente de su artrosis, a la propia Reme que tiene unos extraños calores cuando está cerca de un hombre, y a Paciano que se ha escapado a bailar con Asunción y ha vuelto a casa lesionado. De madrugrada, Luís, regresa al hostal y por fin tiene una profunda conversación con Reme.