China le reconoce a Emilia que fue ella quien intentó matar a su perrito y discute con ella con violencia hasta golpearla y dejarla inconsciente. Después entra en crisis y se tira alcohol encima. La policía está casa vez más cerca de las barracas y Benicio decide comenzar con la matanza de los prisioneros. Mientras discute con Antonio, Mercedes empieza a angustiarse al darse cuenta que la matanza con la que soñó está por cumplirse. Mientras Benicio procede al exterminio de los prisioneros, Mercedes va “viendo” lo que sucede. Está en trance, y le describe a Antonio, lo que sucede. Es un horror. Llora desencajada, se desestabiliza. Antonio impactado. Cátulo entra en crisis. Sabe lo que pasó. Lo que significa. En la casa de Antonio, prende velas, por los muertos, habla, casi en trance. Pedro no lo puede frenar. Al fin, llega Antonio. Cátulo lo culpa a él, en cierta forma, por no hacer nada. Son todos culpables de ese horror. Victoria, junto a Bernardo y Estrella, encuentran el lugar donde los cuerpos fueron incinerados. Todos quedan impactados por lo que sucedió.La jueza, en su interior, sabe que hay alguien muy importante detrás de esto y va a hacer lo imposible para detenerlo.