Capítulo emitido el 22 de noviembre. Octavio (Rodolfo Ranni) vuelve a ocupar el cargo de intendente de Vidisterra y, de esta forma, da rienda suelta a los macabros planes de Benicio (Vicuña). Su blanco es Victoria (Viviana Saccone), la jueza, quien habiendo dado muestras de su honestidad, es una amenaza para ellos y sus negocios. Cosme (Sergio Surraco), acompañado por un séquito de matones, intercepta a la jueza en las calles del pueblo y, desde un vehículo, le dispara a sangre fría. Victoria cae agonizante; Antonio (Luciano Castro) la acompaña en sus últimos segundos de vida. Además, Octavio decide hacer intervenir a los militares en Vidisterra. Las calles del pueblo se colman de hombres uniformados que requisan viviendas y amedrentan a los habitantes del lugar. Inmersos en aquel régimen de terror, Mercedes (Romina Gaetani) y Antonio (Luciano Castro) intentarán rescatar a Ian de las garras de Benicio y escapar de allí. Finalmente, Benicio y Octavio se unen y hacen de la vieja cava su lugar de reunión. Benicio se encargó de robar todos los documentos que tenía Victoria en su casas y dentro de todos los papeles encontró un video que dejó grabado la jueza por si llegaban a matarla. En el tape, ella afirma que tiene pruebas contundentes sobre quiénes cometieron los asesinatos más horrorosos de Vidisterra: Vicente Roca, Octavio Capogreco y Benicio Echaguë. Además ella asegura que hay otra copia de ese video.