Más de 50 horas entre los escombros, bajo las piedras de una casa derrumbada. Resistiendo al lado de cadáveres, gusanos y hedor. En la oscuridad, sin apenas aire. Se llama Redjesson Hausteen Claude y tiene sólo dos años. La de Redjesson es una de las pocas historias de supervivencia. Y los responsables de que así fuera se llaman Félix del Amo y Óscar Vega, dos bomberos de Valladolid. "Es nuestro trabajo", dicen, "salvamos a la gente". "El único héroe es el niño, por vivir".Los carniceros hemos localizado a estos dos salva-vidas para que cuenten qué hicieron en Haití y, sobre todo, qué sintieron al ayudar a una población en estado de emergencia extrema.