Hijiri is crushed to learn that by receiving Tatsuya Otonashi's cornea he has been entered into a contract with the devil that will culminate in the death of both Hijiri and his close friend, and Tatsuya's daughter, Kazusa. Determined to defy the pact, Hijiri tries to go on with life as normal but soon discovers this is not an option and that the assistance of Tsuzuki and Hisoka may be his only solution.
Hijiri se siente abrumado al saber que al recibir la córnea de Tatsuya Otonashi, ha firmado un contrato con el diablo que culminará con la muerte de Hijiri y su amigo cercano, y la hija de Tatsuya, Kazusa. Decidido a desafiar el pacto, Hijiri intenta seguir con su vida normal, pero pronto descubre que esta no es una opción y que la ayuda de Tsuzuki e Hisoka puede ser su única solución.
