Las placas tectónicas que duermen en el lecho del mar Mediterráneo y del océano Atlántico amenazan el litoral sur de la península ibérica. El día que una de las fallas despierte, desatará contra nuestras costas su enorme fuerza destructora. Emilio descubre que ni tan siquiera sería la primera vez que viviríamos en España algo así. En 1755 Huelva y Cádiz quedaron arrasadas por olas que superaron los 15 metros de altura. Emilio viaja a la ciudad de Cádiz, a Chipiona y a Málaga para reunir a su particular «Gabinete de Crisis» y averiguar qué medidas se están tomando para evitar el peor escenario posible.
En España tenemos cinco plantas nucleares que aportan el 20 % de la energía que consumimos en nuestros hogares y nuestra industria. En general, son instalaciones seguras. El último gran accidente fue el de Fukushima en 2011. Pero, como dicen todos los expertos, la seguridad al cien por cien no existe. Para comprobar el grado de seguridad de nuestras centrales, Emilio viaja a Tarragona para visitar una parte de Vandellòs II, analiza en Cáceres cómo podría afectar al medio ambiente un escape radiactivo procedente de la central de Almaraz, y en el Hospital La Fe de València investiga los efectos de la radiación sobre la salud humana.