Ya tenemos pruebas de que el cerebro de los nativos digitales se desarrolla de forma diferente al de los nacidos unas décadas antes. Las horas que los jóvenes pasan frente a una pantalla de ordenador navegando por la red, jugando a videojuegos, y contactados entre sí a través de las redes sociales, son solo algunos de los estímulos que bombardean su mente a diario. Sus conexiones neuronales se están adaptando al mundo de la tecnología digital. Durante siglos el hombre ha trabajado en cambiar su hábitat y ahora es el hábitat el que cambia a los seres humanos. Hoy en día el hombre está dando sus primeros pasos hacia una nueva especie humana con capacidades superiores, el Homo sapiens digitalis.